14 de Junio de 2024
La energía se ha convertido en uno de los principales factores que determinan dónde se instalan las empresas industriales. Si bien los retos del nearshoring, los costos, la continuidad operativa y las metas de sostenibilidad están marcando una nueva realidad en México, la capacidad energética hoy está definiendo la competitividad. Ya no es solo cuestión ambiental, sino una estrategia clave para atraer inversión y garantizar operaciones rentables.
En este contexto, FINSA está impulsando un modelo de eficiencia energética, descarbonización y resiliencia operativa en sus parques industriales en operación en México. La propuesta destaca no solo por su enfoque integral, sino porque elimina la necesidad de inversión inicial por parte de los inquilinos.
Hoy en día, las cadenas de suministro exigen más que infraestructura física; requieren infraestructura eléctrica, así como un suministro confiable y sostenible. Las empresas globales que llegan a México buscan estabilidad y continuidad operativa sin interrupciones.
La eficiencia energética se ha convertido en un factor decisivo para quienes desean instalarse en espacios industriales competitivos y preparados para el futuro.
Uno de los grandes diferenciadores en esta iniciativa de FINSA, es que los inquilinos pueden acceder a soluciones energéticas llave en mano sin inversión inicial. Esto permite que tanto pequeñas como grandes empresas aprovechen tecnologías avanzadas sin comprometer su flujo de capital.
El programa incluye un portafolio completo diseñado para cubrir necesidades operativas:
Aprovechamiento de techos industriales para producir energía limpia directamente en sitio.
Sistemas que corrigen flickers, elevan la calidad y aseguran continuidad operativa.
Mitigación de interrupciones eléctricas, garantizando confiabilidad en la operación diaria.
Este punto se refiere a la optimización de costos de suministro.
Plataforma con métricas de consumo en tiempo real, costos y emisiones para reportes corporativos y toma de decisiones.
Además de garantizar estabilidad operativa, el modelo ofrece ventajas inmediatas:
Ahorros frente a tarifas convencionales.
Reducción inmediata y verificable de emisiones de CO₂.
Cumplimiento con metas ESG y compromisos SBTi.
Estas soluciones hacen que las empresas no sólo reduzcan pasivos ambientales, sino que también fortalezcan su competitividad frente a clientes e inversionistas.
Además de las soluciones dentro de las naves industriales, FINSA está implementando proyectos de energía renovable en sus áreas comunes, como iluminación, vialidades y amenidades, reforzando su visión de mejora continua, sostenibilidad y resiliencia energética.
“El futuro de la industria depende de contar con energía confiable, competitiva y limpia. Con este programa, nuestros clientes acceden a soluciones de clase mundial que les generan ahorros y resiliencia energética desde el primer día”, destacó Sergio Argüelles, presidente y CEO de FINSA.
Este programa forma parte del plan integral de FINSA Energy, que también contempla la construcción de subestaciones de alta tensión y líneas de transmisión en alta y media tensión, fortaleciendo la infraestructura eléctrica y promoviendo una gestión más eficiente de la capacidad energética en sus desarrollos y con sus clientes.